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En nuestra sociedad actual, la seguridad personal es una preocupación constante para madres y padres. Cada día, nos encontramos con noticias alarmantes que ponen de manifiesto la importancia de que nuestras hijas estén preparadas para enfrentar situaciones potencialmente peligrosas para ellas y su bienestar. Una forma efectiva de empoderarlas y darles herramientas útiles es a través de las clases de defensa personal para niñas. Además de aprender técnicas prácticas de autodefensa, en estas clases se fomenta la seguridad en sí mismas y la toma de decisiones informadas.
La realidad de nuestro país en cifras
De acuerdo con las cifras oficiales del Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior, las violaciones en España subieron en 2022 un 34% en relación con en año anterior. En ese año, se cometieron 2.870 violaciones, o al menos esas son las contabilizadas, y que se traducen en ocho cada día.
El total de delitos sexuales denunciados se sitúa por encima de los 17 mil. Sin embargo, hay que recordar que tan solo se denuncia una parte de ellos, puesto que la justicia está, todavía hoy, muy lejos de posicionarse a favor de las víctimas, con cuestionamientos y procesos largos que hacen que aquellas acaben desistiendo. Conocer datos oficiales sobre estos delitos contribuye a entender correctamente la realidad en la que vivimos.
La importancia de la confianza y la seguridad
La autoconfianza y la seguridad en una misma son componentes esenciales para el desarrollo y el bienestar de las niñas y las mujeres en general. En una sociedad donde ambas han sido subestimadas y desfavorecidas, fomentar estas cualidades desde una edad temprana es crucial.
Hay un concepto dominante en la educación, que es el de la indefensión aprendida. Este tecnicismo significa que se aprende a tener un comportamiento pasivo, debido a una sensación subjetiva de que no se tiene la capacidad o los recursos necesarios para actuar en beneficio propio. Además de con personas, también se emplea con los animales, para evitar que intenten escapar.
Participar en clases de defensa personal infantil permite romper con esta idea, así como con otros estereotipos arraigados en la sociedad que perpetúan la noción de que las mujeres son débiles y necesitan protección constante.
Al adquirir técnicas de autodefensa, las niñas aprenden que pueden cuidar de sí mismas, que tienen el poder y el derecho de defenderse y que tienen a su alcance medidas proactivas para proteger su propia seguridad.
¿Qué se aprende en las clases de defensa personal para niñas?
Las clases de defensa personal diseñadas especialmente para niñas ofrecen un conjunto de habilidades esenciales que van más allá de las técnicas físicas. Estas clases están diseñadas con un enfoque holístico, lo que significa que no solo las tácticas de autodefensa, sino también la mentalidad, la conciencia situacional y la toma de decisiones informadas.
Técnicas de autodefensa adaptadas
En estas clases, las niñas aprenden técnicas de autodefensa adaptadas a su fuerza y tamaño. En lugar de centrarse en los impactos, el objetivo es incrementar la eficiencia y la efectividad de cada movimiento. Con ellos, se pretende, en primera instancia, liberarse de los agarres del agresor, escapar de situaciones comprometedoras y ganar tiempo para pedir ayuda.
Se hace hincapié en la importancia de la práctica regular para perfeccionar estas habilidades y aumentar la confianza en su ejecución. Cuando no queda otra posibilidad, entonces será el momento de hacer uso de las técnicas de defensa propiamente dichas.
Conciencia situacional y prevención
Las clases de defensa personal para niños y niñas no solo se centran en reacciones físicas, sino también en la prevención y la conciencia situacional. Las niñas aprenden a evaluar su entorno, identificar posibles peligros y tomar decisiones informadas para mantenerse a salvo. De este modo, además de contar con una capa adicional de seguridad, aumentará su confianza para anticipar y responder a amenazas potenciales.
Habilidades emocionales y control
Enfrentar situaciones de peligro puede desencadenar emociones intensas. Por eso, estas clases también se centran en desarrollar habilidades emocionales y el control necesario para tomar decisiones efectivas bajo presión. Mantener la calma y controlar el miedo facilita la concentración en la acción necesaria que se deba realizar. Esta habilidad de manejar emociones es también de gran utilidad en el día a día.
Trabajo en equipo y comunicación
Si bien puede dar la sensación de que las clases de defensa personal o las artes marciales en general se aprenden de manera individual, lo cierto es que el grupo tiene una gran importancia. Y de hecho, estas actividades son excelentes para aprender a trabajar en equipo y a comunicarse desde el respeto.
A través de ejercicios y simulaciones, las niñas pueden aprenden cómo colaborar con otras personas para superar situaciones desafiantes, a pedir ayuda cuando es necesario y a brindar apoyo a sus compañeras. Esta dimensión promueve la solidaridad y la construcción de relaciones de apoyo mutuo, que da lugar a una red de seguridad más amplia en su entorno.
Clases de defensa personal para niños cerca de mí
¿Quieres que tus hijas aprendan a defenderse con clases de defensa personal infantil? En Sambo tenemos cursos específicos para menores, en las que podrán adquirir a su ritmo las habilidades necesarias para enfrentarse a situaciones de riesgo y la confianza para creer en sí mismas.
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